Los protectores solares naturales minimizan o evitan los ingredientes que pueden ser más nocivos para la salud y, en general, los ingredientes sintéticos derivados del petróleo. Además, entre los ingredientes vegetales priorizan los de cultivo ecológico. Por esto algunos los denominan protectores ecológicos. Sólo contienen filtros solares físicos, muy eficaces e innocuos, a no ser que estén en forma de nanopartículas (ver “Cremas de protección solar»).
¿Cómo podemos encontrar protectores solares naturales en el mercado?
– El primer paso es ir a tiendas de productos ecológicos, a dietéticas o a herboristerías., o bien asociarnos a cooperativas o grupos de consumo ecológico. También podemos encontrar en webs con venta en línea de cosmética natural.
– El segundo paso es comprobar que el producto tenga algún sello certificador de cosmética natural. Actualmente en nuestras tiendas podemos encontrar dos de ámbito español y razonablemente al alcance de pequeñas empresas, y seis de ámbito internacional que son otorgados por grandes empresas certificadoras, entre las que es más difícil evitar y detectar prácticas que pueden estar más al servicio de los intereses de los grandes fabricantes que de la cosmética natural. Estos sellos internacionales, por otro lado, comportan para los fabricantes unos costos económico y de gestión importantes.
BioVidaSana (español)
NaTrue (de ámbito europeo)
The Soil Association (británico)
BDIH (alemán)
ICEA (italiano)
Cosmebio (francés)
Ecocert (francés)
En cuanto a los sellos españoles, ACENE es la Asociación de Cosmética Ecológica y Natural de España, formada por una veintena de pequeñas empresas. Aplica los mismos criterios que los del sello COSMOS, o más estrictos en algún aspecto. Son los propios pequeños fabricantes los que garantizan que se cumplan, porque tienen la vocación genuina de cumplirlos, y ACENE de vez en cuando envía una inspección independiente y sin avisar.
El sello BioVidaSana, creado por la asociación Vida Sana, lo otorga la certificadora suiza bio.inspecta. En las etiquetas podemos encontrar «bio.inspecta Vida Sana» o «IMO-Vida Sana», las denominaciones anteriores.
En cuanto a los sellos internacionales, los cinco últimos han creado el sello de ámbito europeo COSMOS, con criterios bastante estrictos, que desde el 1 de enero de 2017 sustituye a las cinco certificaciones en los productos cosméticos. Lo identificaremos por las palabras COSMOS ORGANIC debajo del logo de cada uno de los sellos.
Los ocho garantizan que el producto tiene las características básicas de los protectores naturales y prohíben usar filtros en forma de nanopartículas, excepto Natrue.
Siguendo estos dos pasos llegaremos a protectores solares naturales de unas cuantas marcas. No hay muchas, per sí dos fabricadas en España: la línea Amazonia de la empresa Amapola Biocosmetics, y Ajedrea. Y es que, aunque el sector de la cosmética natural está prosperando bastante en el país, fabricar un protector solar no es sencillo para una empresa pequeña y joven. Por ejemplo, para comprobar el Factor de Protección Solar se tienen que hacer pruebas in vivo, es decir con personas voluntarias, y esto vale mucho dinero. También ocurre que los filtros físicos son unas cinco veces más caros que los químicos, y que con los ingredientes naturales es más laborioso conseguir que la fórmula sea estable.
Amapola Biocosmetics es una pequeña empresa con taller/tienda en San Cristóbal de Segovia y una tienda propia en Barcelona. En su web podemos encontrar todos los puntos donde se venden sus productos, y también podemos comprar en línea. Tiene el sello ecológico BioVidaSana.
Ajedrea es una empresa de Granada, de cuatro trabajadores, que forma parte de ACENE y tiene su sello. Tiene un volumen de producción limitado mediante procesos bastante artesanales y huyendo de la sofisticación, con recetas sencillas. En su web podemos encontrar los puntos de venta en todo el país, y también podemos comprar en línea.
Protectores solares naturales fabricados en el extranjero podemos encontrar, entre otras marcas:
—Lavera y Eco Cosmetics, ambas alemanas. La primera es de las empresas más veteranas en cosmética natural; tiene el sello NaTrue. Eco Cosmetics tiene el sello Ecocert.
—Alga Maris (Francia). Su protector contiene extractos de alga gorria, una especie propia de la costa vasca francesa muy rica en antioxidantes, las sustancias que contrarestan la acción de los radicales libres generados por los rayos UV. Tiene el sello Ecocert.
—Couleur Caramel. Es una marca francesa de maquillaje natural que sólo tiene un producto para proteger del sol: un lápiz para labios, con los sellos Cosmebio i Ecocert.
—Acorelle es una marca cosmética también francesa que tiene una crema solar para bebés. Tiene el sello Cosmebio.
Ojo con las marcas pseudonaturales
En el mercado podemos encontrar cremas protectoras que, aunque se presentan como naturales, más bien deberíamos denominarlas pseudonaturales. Podemos encontrarlas tanto en tiendas de productos ecológicos (por ejemplo en la cadena Veritas, presente en Cataluña, Islas Baleares, País Vasco y Madrid) com en dietéticas.
El motivo es que ponen alguna «característica natural» en la formulación, por ejemplo muchos extractos de plantas o algas, pero también ingredients que no lo son. No llevan ningún sello certificador de cosmética natural, claro está.
Es el caso por ejemplo de la marca británica Jason, presente en todo el mundo. Hemos examinado sus sis protectores solares: cuatro tienen filtros químicos (además de físico) y en tres casos el filtro más abundante (un 7,5% de la fórmula) es el etilexil metoxicinamato, la sustancia identificada como altament preocupante por el International Chemical Secretariat (ver «¿Quién filtra los filtros?»). Todos los productos tienen filtros físicos, pero siempre en menor cantidad que los químicos. Y también en todo encontramos fenoxietanol. Todo ello acompañado de muchas sustancias derivadas de plantas, como decíamos.
En sus etiquetas no encontraremos ninguna certificación natural, pero sí este logotipo, que tiene aspecto de sello certificador:
Otro caso es el de la marca también británica Green People. De sus diez productos protectores del sol, ocho tienen más cantidad de filtro químico que físico, este filtro químico es de los más peligrosos, y el físico (dióxido de titanio) está en forma de nanopartículas. La marca también tiene un lápiz labial protector, con un único filtro: el químico que hemos mencionado.
La marca Anne Marie Börlind, también de una veterana empresa alemana, es una caso distinto de todos los anteriores. La empresa es muy estricta con las características naturales de sus productos, y no usa ninguno de los sellos que hemos visto sino otro, el CSE, que garantiza que la empresa tiene un comportamiento sostenible. Considera que usando sólo filtros físicos no le es posible elaborar protectores solares que cumplan con la normativa europea y a la vez tengan la calidad que ella se impone. Por eso en sus protectores encontramos filtros químicos, en algunos casos acompañando filtros físicos (sin nanopartículas). También podemos encontrar fenoxietanol, un conservante muy irritante, y alcohol, que reseca la piel.
La empresa también tiene la marca Dado Sens, para personas con afecciones dermatológicas complicadas y piel muy sensible.
